La lucha contra la prohibición es una realidad, una realidad que día a día tiene más fuerza y más seguidores. El estado debe dejar de actuar como padre y dejar que los ciudadanos tengan la opción de decidir. Ahora pensemos por un momento lo que supondría la legalización o regularización del cannabis en nuestro país.
- Con una regulación terminaría el consumo de marihuana en menores, uno de los puntos que siempre mencionan aquellos que siguen aferrados a la idea de la prohibición. Es de lógica, al igual que existen establecimientos donde se vende alcohol y un menor no puede comprarlo con el cannabis pasaría lo mismo. Pero con una regulación, cosa que no pasa con el alcohol, una droga que no controla el estado y esto supone un peligro para todos.
- Terminaría el narcotráfico y las mafias, esto ya lo decía José Mujica en uno de sus discursos, si el estado o un club te suministran cannabis de calidad, más barato y además controlan tu consumo ¿Qué hacen las mafias? Nada, no pueden vender más barato, perderían beneficios. Al ser una asociación un conjunto de socios que invierten en un cultivo colectivo, obtenemos por resultado un producto de calidad que las mafias no pueden igualar. En todo momento sabes lo que consumes, si tiene químicos, hongos, patógenos o sustancias dañinas para el individuo.
- Una regulación no supone facilitar el acceso, tengamos presente otras drogas como la oxicodona, es una droga legal pero regularizada que solo puede consumirse con prescripción médica, ¿Tú puedes ir a comprar oxicodona a la farmacia? No, lo mismo pasaría con el cannabis, no todo el mundo puede consumirlo, si sufres algún tipo de trastorno, psicosis o tienes algún familiar con estos problemas no es recomendable que lo consumas.Con el alcohol a día de hoy no existe este control, personas que a lo mejor son propensas a volverse adictos o a sufrir problemas de salud pueden ir a un supermercado y adquirirlo siempre y cuando seas mayor de edad ¿Y el estado en este caso está actuando como padre?
- Más educación y menos prohibición, en Estados Unidos se está siguiendo en cierta medida este modelo, actualmente los estados que permiten el consumo de cannabis invierten mucho más dinero en educar tanto a jóvenes como adultos acerca de esta y muchas sustancias. Como resultado vemos que las multas, los arrestos y los delitos en general se han reducido. No es un secreto que lo prohibido nos da curiosidad, si educamos desde pequeños logramos individuos capaces con conocimientos y voluntad de elección ¿Qué hubieras pensado si de pequeño tu padre te dice que no puedes montar en bicicleta porque “puede” que te hagas daño? Pero si tu padre va contigo y te enseña a manejarla ¿Qué problema existe? El estado te prohíbe consumir ciertas drogas porque “puede” que te vuelvas adicto o te hagan daño.
- Mayor facilidad para el estudio y la elaboración de posibles medicamentos que ayuden a superar o mejorar la condición de ciertas enfermedades.
- También crearía miles de miles de puestos de trabajo, ¿No me crees? Cultivador de marihuana, manicurero, curador, redactor cannábico, catador para dispensarios y clubs, especialista en extracciones, dependiente de cogollos, educador cannábico, personal de seguridad para los cultivos, cocinero cannábico, agencias publicitarias cannábicas, entre otros muchos.
Las opciones son múltiples y España no va por buen camino, si cada vez vemos más políticas a favor de una regulación frente a una prohibición, España nada contracorriente imponiendo duras leyes prohibicionistas que solo funcionarán para que el estado siga lucrándose con las multas y sanciones. Leyes más duras en teoría y según ellos implican un menor consumo ¿Es esto cierto? NO, solo tenemos que hacer un repaso a nuestra historia, cada año aumenta el consumo de drogas y las leyes prohibicionistas ¿Qué sentido tiene seguir en este círculo?
Este tinglado mal montado está en las últimas, se sostiene con pinzas de plástico quemadas por la luz de aquellos que aun ven posible una legalización. ¿Y tú crees que es posible? Coméntanos tu opinión.
